La cirugía de doble pliegue (o doble párpado), conocida también por el nombre blefaroplastia asiática, es un procedimiento de cirugía plástica que tiene como objetivo crear un pliegue del párpado estéticamente atractivo en pacientes que, debido a su origen étnico, tienen un pliegue ausente o mal definido. Un cirujano puede utilizar múltiples técnicas y abordajes para lograr esto, y el mejor método dependerá de la edad del paciente, la anatomía de sus párpados y sus expectativas.
En cuanto a las expectativas, es importante señalar que, aunque algunas personas recurren a este procedimiento para “occidentalizar” el rostro, la mayoría de los pacientes asiáticos no desean cambiar su apariencia étnica sino realzar sus rasgos más atractivos. Por esta razón, debemos considerar la blefaroplastia asiática como una operación radicalmente distinta a la blefaroplastia superior clásica o levantamiento de párpados.
Una cirugía de doble párpado es una operación muy sofisticada que requiere una técnica quirúrgica meticulosa y un amplio conocimiento de la mecánica de la piel del párpado, la fisiología muscular y la relevancia de los paquetes de grasa del párpado en el resultado. Por tanto, esta operación la realizan únicamente cirujanos de párpados (cirujanos oculoplásticos) con entrenamiento en cirugía del párpado asiático.
La cirugía de doble pliegue es un procedimiento ambulatorio que se realiza, en la mayoría de los casos, bajo sedación intravenosa. Teóricamente, la operación podría realizarse únicamente con anestesia local; sin embargo, la operación requiere una manipulación significativa de los tejidos profundos del párpado, lo que puede resultar muy incómodo para la mayoría de los pacientes. Dependiendo de la técnica utilizada, el procedimiento puede durar de 1 a 2 horas.
El cumplimiento de las directivas del cirujano en el proceso de recuperación es esencial para garantizar el mejor resultado posible. Los pacientes deben descansar y evitar el ejercicio durante aproximadamente un mes, un tiempo de recuperación más largo que para un levantamiento de párpados común. Después de esta cirugía habrá hematomas e hinchazón en los párpados. La hinchazón debe mantenerse bajo control con medicamentos orales y medidas conservadoras, ya que, si esta se prolonga demasiado, podría afectar negativamente el resultado quirúrgico. Es fundamental adaptar una dieta antiinflamatoria – con omega 3, vitaminas C, etc. – y mantenerse hidratado para evitar la inflamación prolongada de las incisiones, lo que retrasa la cicatrización.
Nuestro cirujano de párpados se ha formado en las instituciones más prestigiosas de España y Estados Unidos, ofreciendo su experiencia a los pacientes que buscan un profesional con formación especializada. Lo invitamos a conocer más sobre la cirugía de doble párpado en nuestro sitio web y visitar nuestra galería de imágenes de “antes y después” para ver los resultados del Dr. Gómez.