La cirugía plástica facial comprende una amplia gama de procedimientos destinados a mejorar la apariencia facial. Muchas personas asocian esta especialidad quirúrgica con operaciones invasivas que “levantan y rellenan” estructuras faciales que han descendido con la edad. Sin embargo, hay un lado de la cirugía plástica facial que ofrece a los pacientes opciones no quirúrgicas para lograr excelentes resultados estéticos sin el gasto y el tiempo de recuperación asociados con la cirugía. Lo más importante es que estas opciones complementan los procedimientos quirúrgicos estéticos y pueden ayudar a mantener sus resultados.
Rejuvenecimiento quirúrgico: resultados más duraderos … con mayor tiempo de recuperación.
Algo muy importante que debemos comprender es que los procedimientos no quirúrgicos no pueden proporcionar resultados tan duraderos como una cirugía. La razón es que la cirugía produce cambios en la configuración anatómica de los tejidos en un nivel profundo. Las modificaciones en esos tejidos se alcanzan con instrumentos quirúrgicos, y esas modificaciones no se pueden lograr con tratamientos que abordan los cambios del envejecimiento en un nivel superficial. Dicho esto, existen tecnologías más nuevas, como Ultherapy, que pueden modificar los tejidos faciales profundos sin una intervención quirúrgica, pero la mayoría de los cirujanos estarían de acuerdo en que los resultados no son tan duraderos.
El inconveniente, quizás, de lograr un resultado más permanente con una operación es que, en comparación con la mayoría de las alternativas no quirúrgicas, el tiempo de recuperación es mayor. Precisamente porque la cirugía actúa sobre los tejidos de una manera más compleja, los pacientes experimentarán más inflamación. Esto resulta en un aumento de la hinchazón y moretones, y por lo tanto, un proceso de curación más largo. Es decir, con una cirugía los tejidos tardan más en sanar correctamente. Sin embargo, una vez recuperados, los pacientes pueden esperar que sus resultados sean más evidentes y mucho más permanentes que con los procedimientos no quirúrgicos realizados en el consultorio. Al final, para la mayoría de los pacientes, el excelente resultado merece la pena y el tiempo de recuperación se convierte en una simple inversión.
Tratamientos faciales no quirúrgicos: resultados rápidos … poco tiempo de recuperación.
Los procedimientos estéticos quirúrgicos no son para todos. Teniendo esto en cuenta, es importante mencionar los tratamientos disponibles para mejorar la apariencia del rostro que se pueden realizar en un consultorio, sin tener que ir al quirófano. Existen varias opciones que proporcionan resultados buenos y una recuperación rápida; estas incluyen la toxina botulínica (Botox, Xeomin, etc.) para el tratamiento de arrugas, los dispositivos de radiofrecuencia que mejoran la textura de la piel y los rellenos faciales que ayudan a esculpir la cara, agregando volumen. Estos tratamientos brindan excelentes resultados en pacientes con laxitud de la piel moderada y menores grados de envejecimiento. Sin embargo, para los pacientes con signos de envejecimiento más pronunciados, los tratamientos no quirúrgicos pueden fallar en la entrega de los resultados que esperan y que solo se pueden alcanzar con cirugía plástica.
El mejor criterio para realizar procedimientos estéticos no quirúrgicos es como terapia de mantenimiento después de una cirugía plástica. Es importante entender este concepto. Debemos recordar que someterse a un procedimiento quirúrgico estético es como hacer retroceder el reloj del envejecimiento unos años. Sin embargo, el reloj seguirá marcando de nuevo. Los tratamientos no quirúrgicos son una manera perfecta de hacer que el reloj camine a un ritmo más lento; es decir, terapia de mantenimiento. Esto significa que estos tratamientos pueden prolongar significativamente los resultados de la cirugía.
Escoge lo que funciona mejor para ti
Si estas considerando someterte a un procedimiento estético, la clave es averiguar qué funciona mejor en tu situación. Si tienes signos de envejecimiento marcados, deseas resultados duraderos y puedes tomarte el tiempo suficiente para recuperarte, la cirugía puede ser tu mejor opción. Por otro lado, si tienes muy poco envejecimiento facial, no puedes tomarte el tiempo para recuperarte o si estás buscando un cambio sutil en tu apariencia, los tratamientos no quirúrgicos realizados en el consultorio son una mejor alternativa. La mejor manera de tomar una decisión es discutir tus expectativas con tu cirujano y escuchar las ventajas e inconvenientes de cada opción. Un examen personalizado es muy importante para ayudarte a tomar una decisión. Una vez que tengas toda la información sobre ambas opciones, estarás mejor preparado(a) para decidir cuál es la mejor alternativa en tu caso.