Los ojos suelen ser la primera zona del rostro en mostrar los primeros signos del envejecimiento, principalmente porque la piel de los párpados es la más fina del cuerpo. La exposición a diversos factores ambientales como la luz ultravioleta, la contaminación atmosférica y el fenómeno del estrés oxidativo contribuyen al deterioro de las fibras de colágeno y elastina de la dermis con los consiguientes cambios morfológicos. Inevitablemente, estos factores actúan en sintonía con el proceso intrínseco del envejecimiento para provocar la senescencia celular y la pérdida del tono de la piel que se manifiesta en la aparición de líneas finas y arrugas. Este proceso es especialmente evidente en los párpados inferiores.
En esta delicada zona, el cirujano oculoplástico tiene dos opciones terapéuticas principales para recuperar una complexión juvenil de la piel: procedimientos de rejuvenecimiento cutáneo mediante técnicas ablativas de la piel (resurfacing) o resección quirúrgica del exceso de piel. Cada alternativa tiene pros y contras, y no existe un enfoque único para todos. La mejor opción dependerá de la edad, el tipo de piel, el grado de flacidez cutánea y la gravedad del daño cutáneo, entre otros factores.
Resurfacing cutáneo: eliminación de piel dañada para dejar espacio a piel nueva
Los tratamientos de resurfacing cutáneo abarcan diversos procedimientos no quirúrgicos, entre ellos la exfoliación por láser u otros dispositivos basados en energía, los peelings químicos y la microdermoabrasión. La calidad de la piel también se puede mejorar con la mesoterapia, pero esto no entra en la categoría de resurfacing cutáneo y queda fuera del alcance de nuestro blog actual.
La ciencia que sustenta estos tratamientos indica que podemos restaurar la morfología de la piel y mejorar su calidad eliminando las capas externas de piel dañada para estimular la formación de nuevo colágeno y elastina. Una piel más tersa y suave reemplazará la piel envejecida y dañada por el sol, lo que dará a los párpados inferiores un aspecto luminoso y rejuvenecido. La piel nueva también tendrá una apariencia uniforme con una mejora notable en las arrugas finas.
Una desventaja relativa de los tratamientos de resurfacing de la piel es el riesgo inherente de inducir cambios en el color de la piel, ya sea hiperpigmentación o hipopigmentación, especialmente en personas con tonos de piel más oscuros. También existe el riesgo de cicatrices, infección, eritema prolongado (enrojecimiento) y formación de quistes (milia). La mayoría de estas complicaciones se pueden prevenir mediante una cuidadosa selección del paciente, la preparación de la piel con agentes tópicos antes del procedimiento y el empleo de una técnica adecuada. Por lo tanto, es importante que el médico que realiza estos tratamientos tenga experiencia en el manejo de dichas complicaciones.
Resección de la piel: eliminación del exceso para tensar la piel del párpado
En pacientes con daño avanzado de la piel y arrugas severas, o cuando un tono de piel más oscuro contraindica las técnicas ablativas, una resección quirúrgica del exceso de piel es una excelente opción para restaurar la tez juvenil de la región del párpado inferior.
Esta operación, denominada blefaroplastia del párpado inferior, generalmente se realiza en un centro quirúrgico ambulatorio con anestesia local. Cuando la cirugía es más compleja, como en los casos en que se tratan las bolsas del párpado inferior de forma concomitante, puede ser preferible la sedación intravenosa o la anestesia general. En la blefaroplastia es esencial un enfoque conservador, ya que la eliminación excesiva de piel puede provocar fácilmente complicaciones como la retracción del párpado inferior o el ectropión. La mayoría de los cirujanos realizan un procedimiento de reforzamiento cantal (cantopexia o cantoplastia) para prevenir esta complicación.
Sea cual sea el procedimiento, seleccione un especialista con amplia experiencia.
Después de un examen minucioso, su médico determinará la mejor opción para cumplir con sus expectativas. Ya sea que elija un procedimiento de resurfacing de la piel o una intervención quirúrgica para tratar las arrugas debajo de los ojos, es muy importante seleccionar un especialista con la formación adecuada y una experiencia sustancial en el rejuvenecimiento de los párpados.