El término médico que utilizamos para describir la dificultad que tiene un paciente para cerrar los ojos después de una cirugía de párpados es lagophthalmos. El lagoftalmos leve es relativamente común después de la blefaroplastia del párpado superior, aunque también puede ocurrir después de una operación para elevar las cejas. La causa principal del lagoftalmos es la escisión de demasiada piel durante una blefaroplastia estética. Si el paciente no puede cerrar los ojos después de la cirugía plástica de los párpados, la córnea se secará. Esto causará mucha irritación ocular, sensibilidad a la luz, lagrimeo constante y una sensación de cuerpo extraño. Cuando el lagophthalmos es leve y la córnea se mantiene húmeda, la afección puede tratarse médicamente mediante la aplicación de lágrimas artificiales y geles oftálmicos sin conservantes. Sin embargo, cuando el lagoftalmos es grave, es necesario llevar al paciente a sala de operaciones para colocar un injerto de piel en los párpados.
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